lunes, 9 de enero de 2023

El fin de año





 

Felizmente se deslizaban los últimos días del año con mas cosas buenas que malas, que suelen ser más abundantes; la vida es un continuo que se mueve sin hacer ruido y solamente algunas cosas sin mayor importancia nos hacen tomar conciencia del paso de las horas.


En el mundo todo sigue igual, los noticiarios repiten una y otra vez los mismos acontecimientos. Nosotros hemos escuchado con el interés de siempre el discurso del Borbón, y ¡oh sorpresa! hemos sabido que los dos partidos mayoritarios, por una vez, se han mostrado conformes con el discursito. Eso, reconocerán ustedes, tiene un enorme mérito. A mí me hubiera gustado que las opiniones de ambos fueran divergentes, pero… claro que a ninguno nos han preguntado si queríamos conocer la opinión del ciudadano Borbón, si es que tiene opinión, o quién o quienes le escriben la charleta. Pero tampoco nos han preguntado si queremos ver por la tele pública a Raphael cantando sus canciones, o a Ana García Obregón, o a los Morancos, es decir, a los mismos de siempre. Yo me imagino que tienen un contrato para decenios y así nos sale más barato.


Lo dicho, los días van pasando dulcemente, y hasta la meteorología nos ha regalado unas jornadas francamente llevaderas. ¿He dicho francamente?


Y en el borde del año resulta que se nos muere el ex papa, el papa emérito o como se le llame técnicamente y, afortunadamente, Isabel Díaz Ayuso que estaba al quite nos ha alumbrado con un ditirambo digno de una mente preclara como la suya. Lo que hemos sabido es que no se le ha enterrado con aquellos célebres zapatitos rojo carmesí que tan bien le sentaban,sino con unos vulgares zapatones negros.


Con el año nuevo Lula tomó posesión en su país, en la esperanza de que no le descabalguen con otra artimaña judicial, que siempre hay togados dispuestos; y con la amenaza permanente de la sucursal trumpista, cuya potencia de fuego es tan poderosa como hemos visto en las últimas horas; entretanto Bolsonaro se fue a Orlando, Florida, para que nadie pudiera hacerle responsable de lo que sucediera en Brasilia. Alexandria Ocasio-Cortez y otros congresistas demócratas han pedido que se conceda la extradición de Bolsonaro, para lo cual debe ser solicitada por Brasil. En caso afirmativo, que está por ver, ¿qué haría Biden que ha condenado los hechos de Brasilia? Dicho de otro modo, ¿cuando se empezará a usar mano dura contra los ultras? ¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia, que dijo Cicerón?


Por último, y no menos importante, se nos ha muerto O Rei Pelé cuando todo el mundo declaraba a Messi como el más grande de la historia. Lo siento mucho por Messi, pero volver a ver las jugadas del brasileño y gozar de su sonrisa dejan bien a las claras quién es quién.





1 comentario:

  1. El artículo está bien,no es de los mejores,el final malo.Pelé indiscutible como uno de los cuatro mejores de la historia del fútbol,no lo fue tanto desde el punto de vista social. Siempre estuvo con la mafia de la conducción de Batler y su pandilla como Platini etc.Venia de una favela pero se le olvidó pronto y se tragó las alpargatas.Que diferencia con Maradona.

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