lunes, 7 de enero de 2019

España me duele



Seguro que me entenderán mejor por esa frase que si digo España me cansa o me aburre. Pero la realidad es que las dos últimas versiones se ajustan más a lo que siento. Me explico:
Ayer, día de los Reyes Magos, se celebraba también el día de la Pascua Militar (¿...?) Se celebra también el día de la Hispanidad, el de la Guardia Civil, el de las Fuerzas Armadas, y no sé si algún otro. Me pregunto cuantas celebraciones de este pelo tienen en Portugal y en Francia, por citar sólo los países vecinos. Lo cierto es que aquí no se celebra el día de los taxidermistas, o el de los fontaneros, o el de los linotipistas. Que también son españoles. Y no conociendo a ningún taxidermista o linotipista, sí conozco a algún militar y me honro con la amistad de más de uno. Y ya puestos, puedo añadir que siempre me ha parecido denigrante la existencia de esas casas cuartel destartaladas, en las que ningún español debiera vivir.
Lo de ayer, con el brillo de tanta medalla –que alguna de ellas tiene peso en la nómina-, con esa exhibición de uniformes, con el presidente del gobierno con chaqué, con una reina a la que pronto no vamos a conocer si sigue modificando su rostro, me retrotrajo a esas imágenes de familia de los zares de todas las Rusias, o del emperador  alemán con el canciller Bismark; es decir, fotos de otro tiempo, de un tiempo ya ido, ya pasado. España no es así, los españoles no vestimos así, y no entiendo a qué viene esa ostentación como no sea una demostración de superioridad, que creo que no viene al caso.
Y luego, el lenguaje: la bandera es signo de soberanía, de independencia, de unidad e integridad, nos dicen. Soberanía, cuando muchas de las empresas españolas tienen participación extranjera en su capital, total o parcialmente, cuando las decisiones que las atañen se toman en otros países, cuando España como nación debe a acreedores exteriores, entre deuda pública y privada, más de lo que producimos en todo un año, cuando nuestro banco central radica en Frankfurt y nuestras políticas económicas están encorsetadas por decisiones tomadas en Bruselas, cuando las corporaciones que dirigen las redes sociales que conforman cada día más nuestra forma de ser no tienen ninguna relación con nosotros, etcétera, etcétera, etcétera. ¿De verdad creemos que somos independientes y soberanos e íntegros? ¿Nosotros, que somos los capitanes de la corrupción, empezando por la mismísima casa real, que tiene un miembro encarcelado por esa causa?
España me duele, me cansa, me aburre. ¿Cuál de estos verbos, de estos estados de ánimo, está más ajustado a la realidad?

1 comentario:

  1. Un lector francés que prefiere conservar su anonimato, me envía el siguiente texto sobre la realidad de las conmemoraciones militares en su país:
    Laceremonia principal es el 14 juillet fête nationale con desfile de todos los cuerpos del ejercito
    Comparable al 12 de octubre en España
    Para el año nuevo el presidente presenta sus felicitaciones al ejercito (les voeux du président aux armées )en presencia de los notables (ministro de las fuerzas Armadas y algunos generales) pero sin desfile ni demostración de potencial bélico
    Estas son los dos principales actos en el que el gobierno francés homenajea el ejercito
    Pero debemos saber que el pueblo francés tiene en alta estima su ejercito su bandera sus héroes bélicos y símbolos nacionales por ejemplo casi todos hablan del imperio como si Napoleón hubiese sido un semi Dios y eso que la mayor parte de entre ellos no conocen o quieren ignorar una gran parte de esta historia
    Saludos

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