jueves, 4 de octubre de 2012

Los viejos tiempos




La asamblea parlamentaria de Castilla-La Mancha acaba de aprobar, con la mayoría de que dispone el PP, que los diputados no cobren sueldo y sólo ingresen las dietas que les correspondan por asistencia a reuniones o comisiones, más los gastos de desplazamiento que esas actividades les ocasionen.
Esto me recuerda los viejos tiempos porque durante el franquismo así ocurría; ya se sabe que con Franco vivíamos mejor (sobre todo algunos). Pienso que con esto se busca una especie de vuelta al pasado alimentada por la nostalgia de tiempos pretéritos y trufada con modernas teorías como las que propugnan que para qué tantos políticos, si total no hacen nada, que sería mejor gente que entendiera de los asuntos a tratar -¿será que hay pocos altos cargos y personal de confianza?- y que, en definitiva, por qué los políticos tienen que ganar tanto dinero, que ganen lo que se gana en la calle, que son todos iguales, los de un partido y el otro y que bastante desprestigiada está ya la política para que tengamos que mantenerla.
Los que recordamos los viejos tiempos recordamos también otras frases de aquellos años, tan cargadas de razón como éstas de ahora, como que la política es para los políticos, que es para los que viven de ella y que es mucho mejor no meterse en política. La primera quería decir que la política era un coto vedado, la segunda que a ellos les daba dinero y la tercera, no te metas si no quieres salir con la cabeza caliente y los pies fríos.
De este modo, ellos gobernaban a su antojo, defendiendo sus privilegios y pretendiendo eternizarse en sus prebendas.
La presidenta de Castilla-La Mancha sabe bien lo que ha querido conseguir con esa medida, ir deshaciéndose de la oposición, manejar a su antojo a su cohorte de palmeros y tratar de gobernar como en los viejos tiempos, convirtiendo a los ciudadanos en súbditos.
¿Será posible que haya quién no lo entienda? Ya nos lo advirtió Miguel Hernández en su Viento del Pueblo: …yugos os quieren poner gentes de la hierba mala…

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